En cualquier obra, ya sea pública o privada, hay algo que nunca puede faltar: un presupuesto bien hecho. Este documento no solo determina el costo estimado del proyecto, también refleja la seriedad y la planificación detrás de cada propuesta. A continuación, te explicamos qué tipos de presupuestos existen, cómo elaborarlos correctamente y cómo la tecnología —como un buen ERP— puede ayudarte a optimizar el proceso.
En este artículo encontrarás:
Tipos de presupuestos de obra según el cliente
➤ Presupuesto para licitación pública
Cuando una empresa participa en una licitación pública, debe presentar una oferta económica que respete el tope establecido por la entidad estatal. Este presupuesto se convierte en la base de la propuesta, e incluye tanto el coste como las condiciones técnicas requeridas. Si la empresa propone mejoras (mejores materiales, mayor eficiencia, etc.), puede ganar puntos y aumentar sus opciones de ser elegida.
➤ Presupuesto para clientes particulares o empresas privadas
En estos casos, el presupuesto tiene que transmitir algo más que números: debe reflejar profesionalismo, claridad, experiencia y confianza. Es clave presentar un documento detallado, claro y transparente, que ayude al cliente a entender el alcance real del proyecto y los motivos detrás de cada cifra.
Claves para elaborar un presupuesto de construcción
1. Estudio previo del proyecto
Antes de empezar con números, hay que entender el proyecto a fondo: ¿Qué quiere el cliente? ¿Qué tipo de obra es? ¿Qué nivel de calidad se espera? Este análisis inicial puede hacerse en una visita técnica o reunión con el cliente, y es la base para evitar errores posteriores.
2. Definir tareas y tiempos
Una vez conocidos los requerimientos, se deben listar todas las tareas necesarias, tiempos de ejecución estimados y cualquier elemento relevante para calcular costos con precisión.
3. Calcular correctamente los costes
Aquí se debe distinguir entre:
- Costes directos: materiales, mano de obra, alquiler de maquinaria, gestión de residuos, etc.
Se deben considerar también las mermas (material desperdiciado o no aprovechable), que pueden representar entre un 5% y un 30% del total, según el tipo de insumo. - Costes indirectos: seguros, licencias, transporte, servicios auxiliares (agua/luz de obra), vigilancia, técnicos de obra, etc.
Aunque no forman parte directa del trabajo constructivo, son gastos imprescindibles y deben estar contemplados desde el inicio.
4. Añadir el margen de beneficio
Sobre el total de costes se suma un porcentaje de utilidad que, dependiendo del tipo de obra y empresa, suele oscilar entre un 6% y un 20%. A esto se le debe añadir el IVA correspondiente.
5. Considerar casos de IVA reducido
En reformas de viviendas particulares, puede aplicarse un IVA del 10%, siempre que se cumplan ciertos requisitos (como antigüedad del inmueble y que los materiales no superen el 40% del total del presupuesto).
¿Qué información debe contener un presupuesto de obra?
Un presupuesto completo y profesional debe incluir:
- Datos de ambas partes: empresa y cliente (razón social, NIF, contactos, etc.)
- Descripción detallada de los trabajos: dividido por partidas o fases, con tareas y precios por unidad.
- Materiales y calidades: aunque no es obligatorio desglosarlos, especificar el tipo y nivel de calidad aporta confianza.
- Servicios no incluidos: dejar claro qué no forma parte del trabajo (desmontaje de muebles, permisos, etc.).
- Precio final con impuestos
- Condiciones de pago: anticipos, plazos o hitos de cobro.
- Fechas estimadas de inicio y finalización
- Garantías y condiciones legales: cobertura del trabajo, daños a terceros, vigencia del presupuesto, etc.
¿Cómo te ayuda un ERP de construcción a presupuestar mejor?
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. Genera presupuestos detallados en minutos, a partir de plantillas y proyectos anteriores.
. Calcula automáticamente los precios unitarios, mermas y costes indirectos.
. Controla avances físicos y financieros en tiempo real.
. Permite ajustar presupuestos con base en cambios de diseño, precios o tiempos.
. Genera informes, comparativas y versiones de un mismo presupuesto.
. Conecta con compras, almacén, contabilidad y facturación.
Hacer un presupuesto de obra no es solo “sumar números”. Es anticiparse, planificar y transmitir profesionalismo.
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